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Os invito a escuchar nuestro segundo podcast de comunicación no verbal con mi querida #Melanie, de #Amayaco, donde daremos un montón de tips a la hora de hablar en público.


En concreto trataremos temas tan interesantes como:


Trucos para empoderarnos antes de salir a hablar en público, sentir seguridad y transmitir confianza.

Cómo transmitimos seguridad, vulnerabilidad o seducción.

Cómo me puedo preparar antes, para conectar con mi interior y transmitir estabilidad.

Sumisión y autoritarismo, cómo se ven, por qué son dos extremos que se dan la mano, cómo se detectan y cómo se corrigen.

Qué errores cometen las personas con perfil intelectual al hablar en público. Pensadores, científicos y escritores: ¡atención a vuestros cuerpos!


¿Por qué pensamos que no es bueno mover mucho las manos?


¿Qué es estar en contra marca?


¿Qué ocurre cuando hacemos vaivén y balanceo en pies y piernas? ¿qué transmite esto? ¿Y por qué lo hacemos?


¿Y el ritmo? ¿Qué hace nuestro cerebro cuando detecta un ritmo lineal al hablar?

Y las personas que hablan demasiado rápido ¿qué pueden hacer?

Desarrollar habilidades comunicativas es cuestión de conocernos… necesitamos vernos.

La observación y ampliar nuestra propia percepción es el punto de partida. Necesitamos vernos. La comunicación no verbal no se calla.

El ser humano tiene dos necesidades básicas: expresarnos y ser vistos

Autenticidad y coherencia ponen de manifiesto el personaje que no llega y que crea un juicio y una barrera entre el comunicador y su público.


https://amayaco.com/blog/nuria-moreno

 
 
 

Actualizado: 31 mar 2019


Somos la historia que nos contamos y nuestro cuerpo contiene célula a célula cada gramo de esta historia.




Las historias que te cuentas dicen mucho más de lo que crees y las que no te cuentas, también, pues tu cuerpo lo expresa todo.


No podemos no comunicar. Somos seres narrantes. Todo el día estamos contándonos historias. Tooodo el día. Y también parte de la noche. Los protagonistas de estas historias evolucionan, ¿verdad? y nosotros también, a través de las historias que nos contamos, a no ser, eso sí, que siempre nos contemos la misma historia. Este es el gran handicap del ser narrante... la repetición. Puñetera.


Los seres humanos tenemos la capacidad de crear según somos capaces de poner lo que vemos, sentimos y olemos en palabras. A esta forma de percibir lo que ocurre fuera y dentro de nosotros, le llamamos realidad. Una vez nos hemos creído a fondo todo lo que nos contamos, no hay quien nos saque de ahí, la realidad real tampoco. Actuamos el personaje hasta el final, hasta que llega un día, que el cuento, como todos los cuentos, se da la vuelta, y es nuestra forma de narrar, la que crea ahora la realidad, y ahí ya estamos muy mal, lo que vivimos y lo que deseamos, no coincide. 


Así, todos, cada uno de nosotros tenemos una única realidad, distinta a lo real, real, y a la de los demás. Y por eso, cuando veo a una persona y escucho lo que se cuenta, con la voz, con las palabras, con los gestos, pero más aún con su forma física y con su lenguaje corporal, entiendo el cuento que se cuenta y lo que hay detrás: sus valores, sus creencias, su motivación, su talento y sus resistencias. 


Basta un minuto para que una persona nos diga quién es. Ya sea porque lo dice o porque no lo dice.


El ser humano, es un ser repetitivo, cuántas veces nos contamos las mismas cosas, cuántas veces repetimos la misma historia, cuántas veces nos damos con la misma piedra. En cada uno de nosotros hay un cuento primordial, un leitmotiv, un hilo conductor que es el eje interior en torno al cual gira todo, y basta con que introduzcamos un cambio mínimo en la mirada de uno de sus personajes, para que todo cambie en el cuento, y también en nosotros. 


Soy Nuria Moreno, y me “encuenta” mi cuento. Soy quien quiero ser y hago lo que me gusta hacer. Trabajo la motivación, el talento y el sueño de las personas. Es un súper cuento. Fabuloso. Mágico. Un sueño que durante mucho tiempo no me atreví a soñar, aunque ya lo vivía. Yo nunca hablaría de retención de talento. No puedo entender esta expresión. Simplemente, son dos palabras que no encajan. Yo colaboro más bien con la fuga de talento, pues el talento no es algo que se deba, se pueda, o se deje retener, no externamente por lo menos. Nada exterior a ti te impide ser quien eres. Es absurdo. Lo único que lo puede contener, son tus propias resistencias. Ningún formato exterior a ti es responsable de que no vivas ya en tu talento, en tu cuento, en quien tú realmente eres. Si no estás fluyendo ya, entonces sí que vives un cuento, pero el de otro. Cuando el talento puja por salir, no te deja tranquilo, te demanda día y noche trabajar identidad, esencia, observación. Cuando ya estás ahí, también demanda identidad, esencia, observación. Ya lo sé, es lo mismo, pero ya es otra cosa. Ya no dejas de estar presente, salvo para comprobar el otro lado de la moneda, tu "menos yo", y volverte a colocar en positivo, en confianza. Otro handicap del ser narrante, la incredulidad. Necesitamos comprobar una y otra vez estar en el camino certero del alma, una especie reconfirmación constante de que me siento yo, en mi salsa, nurísima, por poner un ejemplo. Es una cuestión de fe, de fidelidad, de confianza, en nosotros mismos. La diferencia entre mi más yo y mi menos yo, es el disfrute, la gratitud, la creatividad. Estar alineado con tu talento es una motivación sin fin. Lo que hay dentro brota desde lo más profundo con facilidad y no puede no expresarse, estalla. Y te satisface mares. Si estás en ese momento, te invito a una sesión para descubrir tu talento y tomar ese impulso definitivo a un océano de estímulos para desplegar tus alas, o tus aletas.


Eres lo que te cuentas, por eso puedes llegar a ser quien quieras ser, quien te quepa imaginar o quien te atrevas a soñar. Al final siempre serás quien siempre fuiste, pero a otra escala. Persigue tu sueño más alto, pero primero, conócete. Elige cara o cruz. En qué lado de la moneda quieres estar. Comprueba cómo se siente. Y decíde. Toma una dirección. Apuesta. Arriesga. La seguridad exterior no existe. Todo es una cuestión de confianza en ti mismo, de saber quién eres. De apostar por ti.


Tu comunicación no verbal también narra tu historia personal, porque también cuenta, lo que no acertamos a poner en palabras. No podemos no comunicar.


¿Y tú? ¿qué te cuentas? ¡Cuéntame!




Actualizado: 19 mar 2019



#Zidane

¿Qué os pareció la presentación del pasado lunes de Zidane en el Bernabéu?

Sinceramente, a mí me gustó. Os cuento por qué.


Zidane transmite compromiso, confianza, entereza, serenidad, tranquilidad, muchísima reflexión. Una justa medida entre dar y recibir, equilibrio por tanto. También dirección, solo dice lo que quiere decir, no se deja llevar. Autodominio, corta, bloquea, contraataca, pero suave, con mucha clase. Transmite seguridad, espacio interior, conexión, y algo muy poco corriente en un líder de la altísima talla de Zidane: humildad. La humildad es básica y un bien escaso. Como veis, a Zidane no le resta fuerza, todo lo contrario. Todo en Zidane expresa fuerza, su estructura, su mirada, sus facciones, su tez, su frontalidad, su postura erguida y relajada a la vez. Vemos fuerza, sí, pero no tensión. Humildad no es sinónimo de sumisión ni debilidad. Fuerza y humildad juntas son sinónimo de firmeza, y esto también es un bien escaso. Todos deberíamos aspirar a esta simbiosis. Es lo que nos permite poder lidiar grandes batallas y llegar lejos, la firmeza. Grande Zidane.


Estas son cualidades que no se ven a menudo en figuras públicas y que no se pueden fingir. No puedes dar lo que no tienes. Lo transmites si lo tienes. Si no lo tienes, no lo tienes. Entonces, ¿qué puedes transmitir? Si lo quieres, lo tienes que trabajar. ¿Querías trucos? Aprender a comunicar no es cuestión de trucos. Aprender a comunicar no es aprender a impostar. Es trabajo interior que empieza por querer verse a uno mismo, ser capaz de verse en primer lugar, y a continuación, de implicarse, de trabajarse en fondo y forma, no solo en forma.


Tu comunicación no verbal es tu marca personal. Puedes estar en marca o en contramarca. Si pones en valor tus cualidades y muestras quién eres estás en tu más yo, todo fluye, si por contrario, las frenas, te frenas, estarás en tu menos yo, en contramarca, en contra de ti mismo. Se nota, ¿sabes? Y si hay algo que juzgan las personas, y con razón, es la contradicción, la incoherencia, lo que no cuadra. Cuando vemos un cuerpo hablar, es decir, moverse, esperamos que haya una armonía entre dentro y fuera, entre fondo y forma. Nadie se salva de esta valoración del inconsciente colectivo. Que es inmediato y fidedigno, por cierto. Y es que somos máquinas de detectar incoherencias, y en este sentido todos sabemos comunicación no verbal, es el primer idioma que aprendemos y que hablamos durante nuestro primer año de vida, y muchos más.

¿Qué dice tu marca personal? El trabajo a la hora de comunicar, empieza por ti. Porque cómo comunicas es una cuestión de identidad, de ser auténtico, de ser tú.


Nuria Moreno

ASESORA DE COMUNICACIÓN

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